Delincuentes captan víctimas, espían contactos, roban fotografías y clonan perfiles en redes para engañar a familiares y amigos. Este método delictivo se agravó durante la pandemia, pero cada semana se registra un número creciente de casos desde hace dos años.

Artículo de Mayra García Sánchez *

MADRID, España.- Miguel, un mexicano en España, cuenta su experiencia con estafadores que utilizan las redes sociales para obtener la información de contactos personales a los que luego contactan para sacarles dinero.

“Crearon un perfil nuevo por messenger, eligieron a un amigo y se hicieron pasar por mí. Le dijeron que iba a mandar un paquete y pedían el favor de ir a recogerlo. Entonces, dejaron pasar unos días para hacerlo más creíble y después alguien llama a mi amigo y le dicen que ya llegó el paquete, pero que por cuestiones de aduana me pasé la franquicia y que hay que pagar una cantidad de dinero”, cuenta este tijuanense.

Una persona que se hace pasar por él se pone en contacto con su amigo para pedirle que “le haga el paro”, que pague la diferencia, que y llegando allá, le pagará de vuelta y le dará un extra por las molestias.

El paquete en la aduana es la estafa favorita para tratar de engañar a familiares y amigos que tienen algún conocido en España, según afirmaciones de Carolina Hernández, presidenta de la asociación Mexicanas por España. Hernández Ruíz alertó que esta oleada de extorsiones y estafas no para desde hace dos años y que desde la pandemia se ha incrementado. Estas bandas suelen utilizar los grupos de mexicanos en Facebook para captar “blancos fáciles”, por lo que exhorta a los mexicanos en España a tomar precauciones y a advertir a familiares y amigos, así como a reforzar su seguridad en redes.

“Estas personas observan desde grupos de mexicanos y allí hacen contacto, hay que tener cuidado, buscar que esos grupos tengan administrador y que estén al pendiente del grupo. Hay que advertir a nuestros familiares lo que está pasando para que no caigan en esa trampa”, dice Hernández Ruiz.

Laura, originaria de Nuevo León, reaccionó a tiempo cuando intentaron extorsionarla de forma similar, haciéndose pasar por su hermano en un mensaje por redes sociales con una foto de él.

“Me dijeron que venía de camino a España. ¡Me asusté! Vive en una ciudad muy peligrosa, me escribían mensajes de voz que eliminaban antes de poder leer, me hacían infinidad de llamadas perdidas, estaban tratando de meterme miedo, pero una palabra me hizo  encender los focos de alerta, una palabra que mi hermano jamás me diría”, dice esta mexicana. Así fue cómo vio que el número tenía clave de Puebla, donde no vive nadie de su familia. Colgó el teléfono al comprender que se trataba de extorsionadores.

Podría creerse que los miles de kilómetros que dividen a México de España nos mantienen a salvo del cáncer de la extorsión, pero cuando los delincuentes ponen el foco en los mexicanos en España, la situación empieza a preocupar.

Carlos Leal López, experto en seguridad, comentó que las campañas de información sobre cómo operan los extorsionadores telefónicos en México, han disminuido las ganancias de estas bandas, por lo que migran del Whatsapp a otras plataformas y se extienden a otros países para mantener su negocio. De ahí que las redes sociales se conviertan en una fuente de información ideal, para dar con la víctima perfecta.

Carlos Leal López

Carlos Leal López, Gerente de Seguridad en Grupo Burgos

Cuando las víctimas son empresarios y las redes sociales son una herramienta importante de trabajo, el experto en seguridad, aconseja llevar a cabo una verificación de cada posible cliente que solicite información por medio de aplicaciones que ayudan a verificar cuando un perfil es falso. Recalcó la importancia de no mezclar el perfil personal con uno profesional ya que esa situación genera más vulnerabilidad.

“La cantidad de personas que tienes agregadas a tus redes sociales te convierte en blanco fácil, a mayor cantidad de personas pierdes el control. Buscan personas que tienen expuesto su perfil para poder sacar información familiar, empresarial y analizan a la víctima para saber con qué cantidad lo pueden extorsionar  fácilmente”, afirma Leal López.

Ante este tipo de extorsiones, es importante guardar la calma, recopilar la mayor cantidad de información posible para denunciar, como pueden ser audios, papelería, capturas de pantalla, números de teléfono que te hayan proporcionado para generar algún pago.

En México se intentan más de 3.000 extorsiones, según el Consejo para la Ley y los Derechos Humanos, A.C. El 30% de los afectados paga la extorsión. Se emplean casi 4 millones de celulares, principalmente con claves de Michoacan, Puebla, Sonora, Tabasco y Durango. El organismo advierte de 916 bandas que operan desde cárceles, en su mayoría de la Ciudad de México, y destaca el incremento de bandas que trabajan también desde fuera de las cárceles mexicanas.


Mayra García - Red Global MX

*  Licenciada en Ciencias de la Comunicación, la autora es locutora Certificada y coordina las redes sociales de la Red Global Mx, capítulo España