La continua evolución del mundo de los restaurantes da lugar a ideas disruptivas y de gran potencia a largo plazo.

La tecnología de realidad virtual aplicada para la potenciación de la experiencia sensorial en los restaurantes es uno de los conceptos que cada vez más se va incorporando en el sector de restauración.

Como prueba de ello, Hanna Kulczak, Rigo Delongovea y Rene Brinklye se embarcaron en una aventura que les llevó desde el estado de California a la urbe de Nueva York.

El objetivo del grupo era celebrar un cumpleaños de forma auténtica, y para ello contaron con los servicios de The James Beard Foundation, una organización nacional de artes culinarias que ofrece una experiencia virtual a la hora de comer.

Así, por un total de 125 $ la fundación les ofreció siete platos, una copa de champán y un tutorial sobre cómo utilizar el visor de VR Oculus. A través de esta tecnología, los comensales observaron psicodélicas recreaciones virtuales de productos de alimentación cotidianos: piñas rosadas, cerezas azules y pedazos de carne de gran tamaño.

La aplicación más conocida de la VR es en los videojuegos. Sin embargo, en los últimos años esta tecnología se ha utilizado con otros fines que van más allá de lo lúdico.

Ander Benavente, especialista en Realidad Aumentada (AR) de ZonaTech, apunta que, en el ámbito de la gastronomía, la realidad virtual ofrece modelos y simuladores que permiten transformar el acto de comer en una experiencia sensorial. “El caso más representativo es el restaurante español Sublimotion, donde la tecnología de Samsung Gear VR se incorpora a una mesa de doce comensales, quienes experimentan durante tres horas una percepción aumentada de los platos, además de vivir un show inmersivo con luces y proyecciones 3D”.

Otras marcas que ofrecieron experiencias virtuales para promocionar sus productos fueron Boursin y Kentucky Fried Chicken. Asimismo, en 2015 Nescafé se unió con la división de realidad virtual de Google para llevar a los consumidores a los cafetales brasileños sin que estos tuviesen que abandonar la comodidad de su hogar.

Caso de éxito

Aunque la realidad virtual aísla a cada uno de los individuos que se sientan en la mesa, los gerentes de los restaurantes que utilizan iniciativas basadas en VR están yendo un paso más allá.

En el caso del salón virtual de The James Beard Foundation la organización contó con el trabajo del proyecto Aerobanquets RMX, que antes de aterrizar en Estados Unidos ya había operado en China y Corea del Sur con un trabajo basado en la obra literaria “La cocina futurista: una comida que evitó un suicidio”, de Filippo Tommaso Marinetti.

Para el apartado gastronómico, la fundación trabajó con Chintan Pandya, un chef del restaurante indio Adda de Nueva York y que fue el encargado de preparar el menú de siete platos que deleitó a los asistentes.

Según cuentan el grupo de amigos, la experiencia en The James Beard Foundation no solo fue única y repleta de creatividad y sabores. También causó un revuelo en las redes sociales.