Los sábados hay un mercado de antigüedades en el parque Pushkin. El Parque Pushkin es la frontera natural entre la colonia Doctores y la Colonia Roma. Otro espigón que parte las olas de la Ciudad de México. El primero es un barrio en el que muchos amigos nos recomiendan extremar la precaución al pasear, el segundo, un lugar donde somos nosotros los que hemos aprendido a cuidar nuestra cartera si no queremos endeudar.

Quizá por eso nunca se termina de saber cuándo se convertirá en moderno tener en casa alguno de los trastos viejos que venden los comerciantes en las mesas del mercadillo. Hace unos años, esa línea divisoria estaba situada a una centena de metros al oeste del parque, en una calle que lleva el irónico nombre de Frontera.

Hoy, el frente de batalla de la especulación le gana terreno a la mala fama y ya hay gente con buenos salarios que empieza a vivir más allá del Pushkin. Yo he visto una revista de 1974 que hablaba de vascos y me arrepiento de no haberla comprado porque hoy en día podría haber acabado en la cárcel.