Los refranes nos enseñan cosas que nos sirven en nuestra vida diaria, en lo profesional y en lo social ya que expresan pensamientos y consejos aplicables a nuestra cotidianidad. Además, están al alcance de todos.

Artículo de Carlos Ceceña *

MADRID, España.- Un Refrán es una “frase de origen popular repetida tradicionalmente de forma invariable, en la cual se expresa un pensamiento moral, un consejo o una enseñanza”.

Los refranes, que hemos escuchado y dicho toda nuestra vida, son una fuente de sabiduría popular. Su importancia radica en que “tienen como finalidad la de transmitir una enseñanza o mensaje instructivo, moral o de sabio estimulando en el individuo la reflexión moral e intelectual”, de acuerdo con Significados.com.

Sus consejos están llenos de buenas intenciones y nos enseñan a ser mejores personas.

Valgan los siguientes ejemplos como botones de muestra de lo señalado, que espero que ilustren la importancia de los refranes que nos ayudan a un mejor actuar y a un mejor ser.

El que perservera alcanza

Cito un mensaje que me ha acompañado desde hace muchos años:

Nada en el mundo sustituye a la Perseverancia.

El Talento no, pues hay muchos Inteligentes frustrados;

El Genio tampoco, ya que proliferan los Genios olvidados;

Ni siquiera la educación, pues el mundo está lleno de fracasados bien educados.

Solamente la PERSEVERANCIA y la DECISIÓN lo consiguen todo.

No hagas cosas buenas que parezcan malas 

Desde que conocí este refrán lo he venido aplicando ya que sirve para evitar malos momentos y a no crear confusión o dudas sobre nuestras decisiones o comportamientos. Hay que considerar que aunque nuestra intención haya sido buena, al proyectarla como algo malo podemos generar resentimientos y reacciones y consecuencias negativas.

Ni tanto que queme al santo, ni tanto que no lo alumbre

Es decir que si arrimamos la veladora demasiado, chamuscaremos al pobre santo al que queríamos adorar. Pero si la alejamos demasiado, ya ni lo veremos e igual nos olvidaremos de que está ahí.

El mensaje es que debemos de buscar el justo medio, el punto de equilibrio, lo que es aplicable a muchas situaciones que se nos presentan constantemente. No es fácil, pero si es muy deseable, y puede mejorar nuestra vida y nuestras relaciones.

Al que nace pa’ tamal, del cielo le caen las hojas

Este es un refrán muy mexicano, faltaba más. Y se refiere a que todos traemos una herencia, unas vocaciones y unos talentos innatos que, complementados y enriquecidos con la educación que recibimos, son características personales esenciales.

Conocerlas, fortalecerlas y aprovecharlas, nos permite aspirar a una vida más plena y a una mayor realización personal.

Decía Jean Paul Sartre, filósofo francés, que la felicidad consiste en poder hacer lo que nos gusta. Es decir, poder dedicarnos a nuestra vocación y a lo que nuestros talentos nos impulsen.

Una pregunta existencial suele ser si una pintora, un músico, un escritor, una actriz, un maestro, etc. nace o se hace.

Si aplicamos el dicho de que ni muy muy ni tan tan, diríamos que parte y parte.

Personalmente creo que los más grandes en su campo han traído una contundente carga innata que aprovechan no sin un gran esfuerzo para producir sus obras maestras o lograr sus descubrimientos o creaciones.

Y que el resto de los mortales, que también podemos lograr obras espectaculares si nos lo proponemos, lo tenemos que hacer a base de otros atributos como son la dedicación, una adecuada preparación y, por supuesto, con perseverancia.

Más vale una colorada que diez descoloridas

Un refrán muy utilizado en México que tiene su versión española y que nos está poniendo el dedo en una llaga, auch, que tenemos muchas personas, entre ellas lamentablemente no pocos paisanos mexicanos.

Me refiero a quienes les cuesta mucho trabajo decir que NO a algo que les piden, que para el refrán sería La Colorada, aunque sepan que NO van a poder cumplir.

Y no es de ninguna manera de mala fe. Todo lo contrario. Lo que no se quiere es herir susceptibilidades o parecer bruscos.

Sentimos que contestar que NO a algo porque NO PODEMOS, pareciera que es NO QUEREMOS, y nos hace sentir mal frente a nuestro interlocutor que, suponemos, espera más de nosotros. No queremos causar una desilusión a nuestro amigo, jefe o a quien nos aborda para pedirnos algo.

Y tomamos dos caminos a cuál más de negativo: decir que SÍ, lo que nos llevará a quedar mal; o guardar silencio, quedarnos callados, hacer mutis, desaparecer, lo que causa una pésima impresión en nuestros interlocutores.

Haciendo negocios internacionales aprendí que nuestros clientes aprecian más que les digamos que NO podemos hacer lo que nos solicitan, a que les digamos que sí y les quedemos mal o, peor aún, que nuestra respuesta sea un inexplicable y desesperante silencio.

El mensaje es que es mil veces mejor La Colorada, o sea decir la neta, y evitar situaciones de incumplimiento que pueden resultar incómodas y hasta costosas por reclamaciones, multas o por perder a un cliente.

Concluyo con un refrán pleno de generosidad que nos aplica como anillo al dedo a los miembros de la RED GLOBAL DE MEXICANOS EN ESPAÑA y que nos estimula a seguir dando con desinterés lo mejor de nosotros: “Haz el bien sin mirar a quien”.

Y una última reflexión para estos tiempos complicados: “Al mal tiempo, buena cara”


* Carlos Ceceña

Coordinador eje de emprendimiento de Industrias Creativas de la Red Global MX Capítulo España

carlos.cecena@redglobalmx.es