La galería Yuri López Kullins en Madrid acoge 14 obras de la artista catalana Mho Dueñas hasta el próximo 6 de octubre. La colección, llamada “Ilusiones”, refleja los anhelos que guían a la artista y que ella ha visto inspirar a otras personas con la figura femenina y la naturaleza como conductores.

 

MADRID, España.- La artista catalana Mho Dueñas dibuja desde muy pequeña y reconoce que nunca dejó de hacerlo. Trabajó organizando eventos pero no fue hasta que se quedó embarazada de su hija, en 2004, cuando decidió dedicarse en exclusiva al arte. La galería mexicana Yuri López Kullins acoge su última exposición, Ilusiones, hasta el próximo 6 de octubre de 2018.

Dueñas no estudió arte directamente pero si recibió clases en distintos talleres, como los de María Dolores Casas, Enrique Gargallo, Manera Negra o el Mono de la Tinta. “Creo que donde se aprende es limpiando los pinceles a los que saben, cuando estás con un artista que sabe lo que está haciendo y puedes beber de él”, afirma la artista a Espacio Méx.

Entre todos artistas con los que se ha formado, cuenta que el que más me ha marcado fue Escoti, el primero que le dio un lápiz y un pincel a los ocho años. “Fue la primera persona que me plantó delante de una pared, me dio una brocha y me dijo “sé honesta””, relata.

Aunque se especializa en el óleo Dueñas también trabaja ilustraciones, grabados, fotografía, pintura mural, instalación o intervención sobre objetos cotidianos.

Ilusiones

La artista trabaja por colecciones, busca un tema y trabaja sobre él. Esta muestra reúne 14 obras que se pueden adquirir en la galería. Las ilusiones que recogen estas obras no sólo tratan las suyas, también exploran los objetivos que se imponen las personas. Amapolas, por ejemplo, es un reflejo de una historia que soñó su madre.

Las ilusiones también son vistas como un espejismo, un nexo con la naturaleza, cuenta Dueñas. Las ilusiones que la artista ha captado son añoranzas de sus vivencias, nos cuenta Jorge Arnaldo Fernández, comisario de la muestra. Marina es un ejemplo de estas añoranzas. Esta obra refleja la ilusión de Dueñas porque su hija sea bióloga marina, la ilusión de toda madre o padre por que sus hijos estudien una carrera universitaria y su preocupación por la conservación del medio.

Naturaleza, feminidad y desnudez

Su obra está muy conectada con la naturaleza. “En cada imagen hay una realidad que uno tiene que descubrirla, que sentirla”, afirma Fernández. Entre todos los elementos naturales destaca el agua que se repite en diferentes planos y colecciones de la obra de esta artista.

La figura de la mujer se convierte en el centro de esta muestra, los cuadros reflejan el empoderamiento femenino y reflexionan sobre la toma de una posición más avanzada en el contexto. En esta muestra la artista también se apropia de la figura masculina a través de las obras: Desafortunadamente hombre pez I y Desafortunadamente hombre pez II.

“Conecté enseguida con su obra, sus obras se sienten por la fuerza visual que tienen y transmiten. Es una obra atemporal y muy bien enmarcada en las tendencias actuales”, comenta Fernández.

Es recurrente la figura de la desnudez en su obra y el cuerpo femenino es fundamental. Las mujeres que aparecen en estos trabajos son una creación a partir de emociones como el miedo, la alegría o la frustración.