Las mujeres mexicanas enfrentamos más obstáculos que los varones en el trabajo, la política, la educación y las relaciones de pareja. ¿No te parece que es hora de cambiarlo?

Celebramos el Día Internacional de la Mujer. En más de cuarenta países, incluidos México y España, millones de ciudadanas estamos llamadas a salir a las calles para reivindicar igualdad de derechos y oportunidades, y el fin de todas las formas de violencia machista. Esperamos que este movimiento global genere respuestas y una mayor conciencia social. Mientras, te recordamos las razones por las que, en México, tenemos que seguir trabajando en favor de más de la mitad de la población:

1.- Brecha salarial. Las mujeres mexicanas registran una menor participación en el mercado laboral que los hombres: según datos del Censo, en 1990 las mujeres solo representan el 22% de la fuerza laboral del país, mientras que en 2010 llegaron a representar el 40% de la población económicamente activa. Cuando superan las dificultades que las alejan de un empleo remunerado, el salario que reciben las mujeres es menor que el obtenido por los hombres por actividades similares. Según el reciente estudio Discriminación estructural y desigualdad social, dirigido por Patricio Solís (Conapred, Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación), las mexicanas ganan, en promedio, 34.2% menos que los mexicanos. Asimismo, enfrentan condiciones de segregación ocupacional que bloquean su acceso a algunos tipos de ocupaciones.

2.- Carencias en la alimentación. El estudio Pobreza y género en México, realizado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), indica que los hogares encabezados por mujeres presentan carencias alimentarias en una proporción mayor a los hogares que tienen a un varón como jefe de familia. En 2012, el 24.3% de los hogares encabezados por mujeres presentaron carencias alimentarias, mientras que los que tienen a hombres como jefes de familia sólo 20.5% registraron esta situación. No es de extrañar que las condiciones de pobreza en el país agudicen la desigualdad de género en México. La misma Secretaria de Desarrollo Social reconoce que más de 28 millones de mexicanos tienen “algún nivel de inseguridad alimentaria”.

3.- Acceso a la educación. Datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) muestran que el 98% de las mujeres mexicanas cursan la primaria y el 96% de los hombres del país; de manera similar, en secundaria la matriculación femenina es de 87% y la masculina de 81%. Sin embargo, la situación se revierte en el nivel de educación superior, al que llegan solo el 27% de las mujeres y el 28% de los hombres. Según la misma fuente, las mujeres tienen mayores tasas de graduación de educación universitaria que los hombres, 21% comparado con 18% de ellos; no obstante, aunque ellas terminen la universidad con mejores calificaciones que los hombres, antes de cumplir 30 años ganarán 10% menos que ellos (Grupo de Educación Popular con Mujeres 2012).

 

Las cifras de la desigualdad en México:

– Las mexicanas ganan un salario 34.2% inferior al de los mexicanos.

–  21% de las mujeres mexicanas tienen estudios universitarios; frente al 18% de los hombres.

– Las mujeres con grados universitarios ganan 10% menos que los hombres con los mismos estudios.

– 66.1% de las mexicanas han sufrido alguna vez en su vida violencia sexual, física, laboral y emocional.

– Sólo 9.4% de ellas lo denunció ante la autoridad.

– Las mujeres mexicanas dedican 373 minutos diarios a actividades del hogar. Ellos, 113 minutos.

– En el cuidado de los hijos, las mujeres destinan 53 minutos al día y los hombres solo 15.

4.- Agresiones de pareja. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 66.1% de las mujeres mexicanas han sufrido alguna vez en su vida agresiones de tipo sexual, física, laboral y emocional. Lo peor es que del total de mujeres que han experimentado violencia física y/o sexual por otro agresor distinto a la pareja, sólo el 9.4% presentó una queja o denunció ante alguna autoridad. Datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH-2016) el 49% de las mujeres sufrió violencia emocional; el 41.3% ha sido víctima de agresiones sexuales: el 29% violencia económica, patrimonial o discriminación; en tanto que el 34%, manifestó haber experimentado agresiones físicas a lo largo de su vida, en al menos un ámbito y ejercida por cualquier agresor. De hecho, la extensión de la violencia en el país va desde 52.4% en Chiapas hasta 79.8% en la Ciudad de México. Por desgracia, la violencia de género parece estar arraigada en nuestro país.

5.- Trabajo en el hogar. Las mujeres no solo enfrentan inequidades en el ámbito público, también las viven en sus familias: trabajan más en el hogar que sus contrapartes hombres. Las mujeres mexicanas dedican 373 minutos cada día a diversas actividades del hogar, más de tres veces que los 113 minutos destinados por los hombres, según cifras de la OCDE. En algunas de las tareas realizadas en casa, las diferencias de género son mayores: en el cuidado de los hijos, las mujeres destinan 53 minutos al día y los hombres solo 15; ellos pasan 75 minutos diarios realizando actividades rutinarias como limpieza, preparación de alimentos o lavado de ropa, mientras que ellas le dedican 280 minutos al día, casi cuatro veces más.

Un último dato: México ocupa el lugar 83 de 135 países en el último reporte de Brecha de Género del World Economic Forum. Las mujeres mexicanas seguimos enfrentando más obstáculos que los varones en el trabajo, la política, la educación y las relaciones de pareja. ¿No te parece que ya es hora del cambio?

Ilustraciones: Andrea Robles.