En un nuevo ejercicio democrático y también con el objetivo de integrar a los mexicanos viviendo fuera de México, el Instituto Nacional Electoral (INE) convocó a los mexicanos en el exterior para participar en las elecciones del 6 de junio, una contienda que puso sobre la mesa un número histórico de cargos de elección popular: 19 mil cargos públicos.

Artículo de Alejandra Balleza Sachse *

Twitter: @AleBa_Sa

MADRID, España.- Para votar como mexicano desde el exterior, es necesario ser mayor de edad y tener vigente una credencial INE para votar. Los interesados, originarios de alguna de las entidades federativas participantes en esa elección, tuvimos hasta el 10 de marzo de 2021 para manifestar interés de emitir el sufragio por vía postal o por Internet, las dos modalidades posibles.

Elegí votar vía electrónica por internet. El 9 de marzo recibí la notificación de folio que confirmaba la aceptación de mi solicitud. A partir de ahí, comenzó un largo y engorroso período de comunicaciones por correo electrónico, incluso un par de llamadas telefónicas con personal del organismo electoral.

Voto desde el extranjero

El sistema de Voto electrónico por internet permitía a los usuarios realizar simulacros de voto. Del 22 de mayo y hasta el 6 de junio tuvimos acceso al sistema para emitir el sufragio definitivo.

Soy una de las 997 personas mexicanas en Alemania que se inscribieron para participar en las elecciones. Las últimas cifras oficiales de la Oficina de Estadística en Alemania, registran 7.755 compatriotas en Alemania. Estas cifras excluyen a personas con doble nacionalidad. Según el Consulado Mexicano en Berlín, se estima que en realidad hay unas 25,000 personas mexicanas en Alemania, lo que nos convierte en la cuarta diáspora mexicana en el mundo.

Alejandra Balleza Sachse

Los resultados arrojan una participación ciudadana de apenas el 52.65%. De los mas de 33.000 mexicanos que nos inscribimos para votar desde el extranjero, y del 67% que elegimos voto electrónico -según los conteos y cifras publicadas por el INE-  se recibieron 12.456 votos en esta modalidad, mas el 33% que sufragaron usando el correo postal desde sus países de acogida.

Mas allá de los resultados en cifras y números, esta elección deja entrever escenarios para leerse con detenimiento, entre líneas y con apertura a la reflexión. Esta campaña electoral estuvo marcada por la violencia y la sangre, con decenas de candidatos amenazados y otros mas asesinados. La diversificación y surgimiento de partidos políticos sin grandes bases, sin trabajo de campo ni trayectoria, dio lugar al nombramiento de candidatos sin perfiles ni capacidades, con campañas llenas de discursos baratos y de desacreditación de los adversarios.

Quedó de manifiesto la necesidad de permanencia y fortalecimiento del INE, uno de los órganos constitucionales autónomos de México que algunos cuestionan. Se trata del organismo de apoyo y garante del buen desarrollo de ejercicios democráticos, de los procesos electorales y de la participación ciudadana y la normatividad para regular la participación de todos los actores en una democracia. Los intentos de añejas y malas practicas como la compra de votos o el registro de votos de ciudadanos fallecidos, volvió a darse, lo que denota la inmadurez de muchos. La alternancia en el poder y la pluralidad arrojada en los resultados habla de la necesidad imperante de diseñar nuevas estructuras y dinámicas de gobernanza.

Aunque vivo en el extranjero desde hace años, nunca he dejado de estar vinculada con mi patria, mi tierra, mis orígenes, mis afectos. Gracias a las redes sociales, tuve la oportunidad de seguir las campañas y las propuestas de gobierno y programas de trabajo presentadas por los aspirantes a la gubernatura de mi entidad federativa, Colima.

Confieso que me llevé algunos desencantos y me di algunos topes de cabeza al ver y reconocer el nivel de política que se hace en mi tierra. En tiempos de pandemia, la respuesta y participación de la ciudadanía vuelve a los mítines multitudinarios y aglomeraciones de gente con colores y banderas de sus partidos enarbolando más ánimos de pachanga, que proyectos de gobierno con propuestas solidas, concretas  y apegadas a las necesidades de la comunidad.

Acudí a la cita electoral con el deseo de que el timón que dirigirá el rumbo de mi tierra llegue a manos de un buen gobernante que sea gestor y buen administrador de los recursos, empático con las necesidades de los colimenses, sensible de las problemáticas que atañen a aquella región. Con un verdadero sentido y convicción de servir y no de servirse.

Con esa emoción acudí a mi computadora para emitir mi voto antes del 6 de junio. Con un simple clic, a 10.000 kilómetros de distancia, fui una de esos 147 colimenses dispersados por el mundo que formé parte de esa fiesta democrática que sin lugar a dudas impactará el desenlace de los próximos años de la historia de mi querido y gran país, México.


Alejandra Balleza Sachse

*Alejandra Balleza Casillas (Sachse) nació y creció en México. Licenciada en Comunicación Social  por la Universidad de Colima, tiene una Maestría en Comunicación e Industrias Audiovisuales por la Universidad Internacional de Andalucía. Su desarrollo profesional ha girado en torno a la Televisión y la Radio cultural y de servicio público. Desde hace más 20 años vive en Alemania. Ha formado una familia bicultural, por lo que vive entre dos mundos: México y Alemania. Vive en Berlín, donde se desenvuelve en ambientes multiculturales. Trabaja como periodista independiente, gestora cultural y consultora en el área de cursos de integración para extranjeros, migrantes y refugiados en la VHS, escuela pública alemana. Es miembro de la Red Global MX en el Capítulo Alemania a cargo de los temas: Comunicación/Industrias Creativas/ Diplomacia Cultural. Desde 2020 Alejandra es líder de la Comisión de Comunicación Regional de la Red Global MX-Europa.