No todo está perdido en este mundo sin cabeza cuando esta valiosa reflexión sobre la guerra en Ucrania la aporta una niña mexicana de tan sólo 14 años.

Texto de Lucía L. R.

La guerra nunca acaba bien. Aunque no lo parezca, nunca hay ganadores y siempre hay motivos ocultos cuando hay una guerra. Ucrania y Rusia se han reunido en Turquía para negociar, lo que despierta esperanza. Sin embargo, nada justifica el daño hecho hasta ahora.

Si bien Rusia actuó de forma descontrolada, Ucrania tampoco creo que lo hiciera del todo bien. Un ejemplo fue exponer a sus ciudadanos más jóvenes a una guerra, algo muy decepcionante, al igual que tirar COCTELES MOLOTOV a los tanques rusos, ¿Cómo pensar que era una buena idea? No obstante, no justifico las acciones de Rusia en absoluto. Aunque muchas fuentes explican cómo es el principio de algo mucho peor, yo quiero arriesgarme y pensar que, si tienen un ápice de humanidad, vean que lo que están haciendo está destruyendo a sus países.

Y aunque sea duro vean que hay otras formas de solucionarlo. Lo más triste para mí, es como sabiendo lo que está pasando y pudiendo solucionarlo aún no lo hagan. Lamento mucho las pérdidas de Ucrania y Rusia y sé que, por muchos pésames que les dé, nada borrará lo que ha pasado. Yo confío en que, si nos permitimos perdonar los actos ocurridos, aunque no sea nada fácil, podremos sentir una liberación interior que solo podemos otorgarnos nosotros mismos.