“Todos los mexicanos en España somos embajadores de nuestro país”, dice Roberta Lajous Vargas como mensaje de despedida a la comunidad a la que representó en España desde enero de 2014. En esta entrevista repasa estos seis años de trabajo en la Embajada, sus obstáculos, sus éxitos y también las críticas de las que dice ser consciente.

MADRID, España.- Roberta Lajous Vargas, hasta ahora Embajadora de México en España, pone rumbo a México después de que la Secretaría de Relaciones Exteriores anunciara su designación como coordinadora ejecutiva de la Presidencia Pro Témpore de México en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

Lajous Vargas, que asumirá el cargo el 1 de marzo, habló de su legado tras seis años de trabajo. El 24 de febrero y aún no se da a conocer de forma oficial quién la sucederá al frente de la Embajada situada en el corazón de Madrid, frente al Congreso de los Diputados.

Roberta Lajous Vargas - Carlos Miguélez Monroy

Roberta Lajous Vargas antes de la entrevista en la Embajada de México en España. Foto: Carlos Miguélez Monroy

“Si tuviera que escoger una palabra diría que maravilloso, la culminación de una carrera”, dice Lajous, en referencia también a los 40 años de servicio exterior mexicano que dieron para representar también las embajadas de Austria, Bolivia y Cuba, a la que llegó tras el conocido “comes y te vas” de Vicente Fox a Fidel Castro.

Considera la embajada de México en España la más rica en agenda por la sintonía política, por los intercambios económicos y comerciales, por las relaciones y vínculos culturales, además del dinamismo que aporta una comunidad mexicana con importantes lazos con España y con muchas personas con doble nacionalidad.

Aunque estén aquí con pasaporte español, se sienten como mexicanos y quieren que México sea reconocido como lo que somos, un país importante, como un país que aporta mucho.

Las costras de dolor tras años de felicidad en España con su esposo no impiden que asuma con gusto su regreso a México para encabezar un nuevo desafío, esta vez con un perfil más político.

CELAC, un nuevo desafío para Roberta Lajous Vargas

La aún embajadora se coordinará con el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México y el Secretario de Educación para la reunión de rectores de universidades de América Latina.

CELAC, nuevo destino de Roberta Lajous 1

Celebración en México de la cumbre de la CELAC en enero de este año.

Lajous Vargas señala la celebración en México de la cumbre de la CELAC a principios de enero como momento de inflexión. Marcelo Ebrard, Secretario de Relaciones Exteriores, buscaba una figura diplomática para el diálogo de alto nivel entre las instituciones de distintos países con los que ha tenido relación por su trayectoria profesional, pero también por su maestría en Estudios Latinoamericanos por la Universidad de Stanford.

Criterios para organizar la agenda, principal quebradero de cabeza

Lajous Vargas afirma que su principal dificultad emanaba de los criterios para organizar su agenda, salvo cuando mandaran la alta política mexicana y española.

Lo más difícil es estar en todo lo que te piden: estar en Madrid y estar en Málaga al mismo tiempo, cumplir con la invitación en Sevilla y cumplir en Bilbao. Todas las mañanas vuelvo a ver la agenda, que manejo con lápiz porque hay que estar borrando y disculpándose porque llega un secretario de Estado y hay que atenderlo.

Relación con jefes de estado de España y con representantes españoles

He tenido un dialogo directo con los dos jefes de Estado y con los dos presidentes de Gobierno con los que me ha tocado convivir porque les interesa México. He sentido que somos el aliado más importante en América Latina por el idioma, las inversiones de españoles en México, las inversiones mexicanas en España.

Lajous Vargas considera que la continuidad de una monarquía en la jefatura del estado y el protocolo que implica una monarquía facilitaron su trabajo. Afirma que el Rey Emérito, Juan Carlos de Borbón, conocía América Latina en profundidad y que mostró interés desde el principio en que viniera el presidente de México, entonces Enrique Peña Nieto, mientras su hijo acudió a todas las tomas de posesión como príncipe de Asturias.

Verdaderamente le interesa y, en conversaciones con él, veía que conocen en detalle muchas cosas e incluso preguntaban cosas que me hacían pensar, cómo le respondo. Son personas muy bien informadas y que están muy interesadas en América Latina, sobre todo México.

También asegura haber mantenido una relación fluida tanto con Mariano Rajoy, dos veces en la Embajada con Peña Nieto, como con Pedro Sánchez, a quien acompañó a México, como acompañó a Don Felipe y a Letizia, ya como reyes de España. Saludos de Año Nuevo y conmemoraciones del 12 de octubre le facilitaron tiempo para tratar temas de agenda, algo que compara con muchos embajadores en México.

Sé de embajadores que llegan a México y se quejan de que presentan credenciales y nunca vuelven a ver al presidente de la República, más que de lejos. En cambio, aquí no le puedo decir cuántas veces he conversado con los jefes de Estado y los presidentes del Gobierno.

Roberta Lajous y la comunidad mexicana en España

La embajadora califica de “excepcional” a la comunidad mexicana en España, a la que considera de alto nivel educativo y económico y que muchas veces cuenta con doble nacionalidad.

Se refirió a muchas mexicanas casadas con españoles que buscan integrarse sin perder su identidad para transmitírsela a sus hijos.

Por eso siempre he buscado que haya talleres para niños. Me parece muy legítimo que los mexicanos aquí quieran que sus hijos se sientan orgullosos de su herencia mexicana.

Destaca la labor de asociaciones como Mexicanas en Madrid, que la pusieron en contacto con mujeres casadas con españoles y a las que considera fuentes de apoyo, de información y de comunicación como ya le había ocurrido en otros países.

En Bolivia, yo iba a dar el grito en la Paz, en Santa Cruz y en Cochabamba, todo organizado por mexicanas que estaban casadas con bolivianos que habían ido a estudiar a México.

En cuanto a las críticas recibidas desde enero de 2014, sobre todo centradas en su distancia respecto a la comunidad mexicana, afirma que le han ayudado a conocer las necesidades de la comunidad a la que representa y a mejorar. Asegura que la agenda le impidió en repetidas ocasiones acudir a alguno de los desayunos de Mexicanas en Madrid que había programado.

Roberta Lajous - El Grito

Roberta Lajous Vargas durante ‘el grito’ en Chamberí. Foto: Carlos Miguélez Monroy

“A lo mejor hay gente más simpática que yo”, dice al contar la vez que, sentada en su casa antes poco tiempo antes de emprender su viaje a España, recibió un video que mostraba a multitudes celebrando el Grito que dio el embajador anterior, Francisco Javier Ramírez Acuña.

“Estaba yo asustada y llegó mi hermana de visita. Le dije, ¿cómo lo voy a hacer, cómo voy a organizar estas fiestas? Me dijo: no puedes competir con eso. Cada quién tiene su manera de ser. No soy monedita de oro para caerle bien a todos. Escribo libros, doy conferencias universitarias, me conocen en todas las universidades”, dice Lajous Vargas, consciente de las críticas por no haber organizado fiestas para celebrar el Grito.

Me critican por austera. Me adelanté a la cuarta transformación. Doy el grito el Chamberí, nunca me he sentido más emocionada en mi vida que cuando lo doy en una plaza pública o kiosko.

Trabajo y constancia, sus principales logros como Embajadora

A veces digo qué bárbaro, he estado en friega todos los días, ¿por qué no disfruté más?, ¿por qué no di más paseos? Es mi carácter”, dice quien identifica su trabajo diario como su principal logro estos años sin ausentarse una sola vez por enfermedad. Le tocó organizar una visita de Peña Nieto a España, una del Rey y otra del presidente Sánchez a México y una del presidente Pedro, participar en la firma de 21 acuerdos y encontrar contrapartes en negocios entre ambos países. También considera un logro que no hubiera ninguna crisis en la embajada.

Roberta Lajous Vargas - Carlos Miguélez Monroy

Roberta Lajous Vargas antes de la entrevista. Foto: Carlos Miguélez Monroy

“He estado al pie del cañón todos y cada uno de los días del año. Ahí queda el libro del 40 aniversario de relaciones México-España con todas las actividades que hicimos. Queda la Casa de México, de la que se ha hablado bien y se ha hablado mal”, dice Lajous Vargas, que aprovecha para recordar que más embajadores estaban detrás del inmueble de Alberto Aguilera desde 2004.

Cuenta que, en un desayuno, su antecesor la convenció de sacar un proyecto que estaba muy cerca de conseguirse.

Ha sido muy duro, he recibido muchas críticas y he recibido muchos cuestionamientos”, dice sobre su papel en conseguir poner en funcionamiento la Casa de México.

Mensaje de Lajous a la comunidad mexicana en España

Lajous Vargas concede grado de embajadores a todos los mexicanos en España.

Nos van a juzgar no sólo por lo que yo haga. Todos contribuimos, cada quién en su lugar. Igual represento yo México que la mamá que invita a niños españoles a jugar a su casa con su hijo y les hace una piñata. Cada uno desde su espacio.