En un partido en el que Leo Messi volvió a estar desaparecido, Croacia goleó (3-0) a Argentina.  Un error mayúsculo de Caballero en el primer gol de Rebic al minuto ’52, hundió a una selección argentina que queda al borde de la eliminación en el mundial. 

Nizhni Nóvgorod, Rusia.- No es el Mundial de Argentina ni de Leo Messi. La selección dirigida por Jorge Sampaoli prácticamente dice adiós a la Copa del Mundo de Rusia 2018 después de caer con contundencia ante Croacia por 3-0 en Nizhni Nóvgorod. Matemáticamente aún no está eliminada, pero una victoria mañana de Islandia frente a Nigeria dejaría al borde de la eliminación al equipo sudamericano.

Salió el combinado albiceleste tratando de mostrar mejores sensaciones y fútbol que en el primer partido ante Islandia. Defensa de tres centrales, con Salvio y Acuña como carrileros y Messi en la mediapunta por detrás del ‘Kun’ Agüero. La posesión era argentina, pero Croacia mostraba los dientes cada vez que podía al contraataque. Robaba el balón el equipo europeo y rápido buscaban a Luka Modric para lanzar balones profundos hacia Perisic, Rebic y Mandzukic.

Era un partido de ritmo muy alto, intenso y emocionante por lo mucho que había en juego. Tras el sorprendente empate en la primera jornada ante Islandia, Argentina no podía fallar. Al inicio el balón era argentino, pero el peligro croata. Solo en dos ocasiones, una de Agüero en el minuto ’27 y otra clarísima de Enzo Pérez en el ’30, la albiceleste logró crear ocasiones de gol. Al contragolpe el equipo europeo, comandado por un soberbio Modric y un excelso Rakitic, hacía mucho daño.

En Argentina, no había noticias de Messi. De nuevo el delantero del Barça deambulaba por el campo, bajo una intensa marca por parte de los centrocampistas croatas. Perdonó Rebic poco antes del descanso, pero al regreso de los vestidores, el delantero del Eintracht de Frankfurt aprovechó un error imperdonable de Willy Caballero. Sin presión ninguna, el arquero argentino quería golpear en largo, pero la pegó bombeada y corta, dejándosela en bandeja a Rebic para hacer el primer gol del partido.

Las caras de los jugadores y aficionados argentinos, tras el error de Caballero, eran un poema que después se convertiría en tragedia. Porque Messi siguió desaparecido, Sampaoli hizo cambios a la desesperada, pero la albiceleste ya nunca pudo levantarse de tremendo golpe. Croacia crecía de la mano de Modric y Rakitic.

Era cuestión de minutos. Y al ’81 llegó el segundo tanto con un espectacular disparo desde fuera del área del centrocampista del Real Madrid, que suma ya dos goles en este mundial. Argentina, que ya estaba contra las cuerdas, se venía abajo; K.O. técnico.  Y después llegaría el tercero en el descuento. Rakitic se sumó a la fiesta y anotó a placer a pase de Kovacic

Argentina estaba descosida por completo. Con esta victoria Croacia garantiza su pase a los octavos de final. El equipo europeo lidera el grupo D con seis puntos. Argentina queda tercera con un solo punto, pero con un partido más que Islandia y Nigeria, que se enfrentan mañana. Una victoria del equipo nórdico dejaría a Argentina pendiente de una carambola en la última jornada del mundial. Tendría que golear a Nigeria y que Islandia cayera con una Croacia que ya está clasificada para octavos.

Lágrimas en las gradas del estadio en el rostro de los aficionados argentinos, que ya casi dan por seguro su adiós a Rusia. Messi puede estar ante su último partido en un mundial. La gloria de Croacia hoy es la humillación de toda Argentina.


Fotografías de Juan Carlos Rojas.