Mujeres mexicanas también sufren violencia machista en España

En lo que va de 2018, el Consulado de México en Madrid ha registrado al menos seis casos de violencia de género. Mujeres mexicanas que viven violencia psicológica, física, aislamiento social y/o amenazas de sus parejas o ex parejas. Por su situación de migrantes, y alejadas de sus familias, se encuentran en una situación de especial vulnerabilidad.

MADRID, España.- La historia de Daniela (nombre ficticio por seguridad) empieza y termina con violencia. Tenía 24 años cuando su familia empezó a sufrir amenazas de muerte en México. A ella la intentaron secuestrar en dos ocasiones. Llegó un momento en que por seguridad decidió no salir más de casa. Internet era su única forma de comunicarse con el mundo.

A través de las redes sociales, conoció a un chico español. Él viajó a México. Estuvieron dos meses conviviendo, se enamoraron y Daniela decidió venir a vivir con él a España. “En cuanto vine a Barcelona todo cambió. Empezó a tener un trato muy controlador hacia mi. Me quitaba el móvil, no me dejaba conocer a otras personas ni tener amistades. Me limitaba en todo, no podía salir casi de la casa ni tener una vida normal”, cuenta en entrevista con Espacio Méx.

Daniela ya había sufrido años antes violencia machista de su ex pareja. En una agresión de aquel primer novio, perdió casi por completo la capacidad auditiva en uno de sus oídos.  “Con este chico todo parecía distinto, hasta que me vine a vivir con él a Barcelona. Un día fuimos a un concierto, me puse a hablar y hacerme fotos con un famoso, él se enojó y empezaron los gritos y los empujones. Ahí decidí regresar a México”, recuerda Daniela.

El problema es que faltaba una semana para su vuelo de regreso al País y para que terminase su permiso como turista en España. Él la echó a la calle sin dinero ni recursos. Ahora vive en un piso de protección en otra ciudad de España como solicitante de asilo. “A México tampoco puedo volver porque las amenazas contra mi familia son cada vez más fuertes”.

La de Daniela no es una historia aislada de violencia machista contra mexicanas en España. En lo que va de 2018, el Consulado de México en Madrid ha registrado 6 casos. Además, a través de Facebook, con la asociación Mexicanas en Madrid se comunican entre 5 y 7 connacionales cada mes por episodios de violencia, según cuenta Martha Montejano, coordinadora del área de empoderamiento y violencia contra las mujeres de la asociación Mexicanas en Madrid, presidida por Carolina Hernández.

“No todos los casos que nos reportan terminan siendo violencia machista. Muchas de ellas empiezan con una simple consulta del tipo: ‘Mi marido me grita cuando se enoja, pero no sé si es algo cultural porque él es español’. El problema es que cuando empiezas a preguntar, resulta que, en muchos casos, a los gritos se suma el control del teléfono, el aislamiento social e incluso a las agresiones, amenazas y chantajes”, señala esta especialista en migración y violencia de género.

Perfil de las víctimas

Montejano cuenta que los perfiles de mexicanas víctimas de violencia en España son muy diversos, pero identifica dos grandes grupos. Por un lado, el de mujeres como Daniela, que vienen por un flechazo a través de Internet y encuentran un mundo real muy distinto. “Y no nada más chicas de 20 o 30 años. También tenemos casos de mujeres de 50 y hasta 60 que han venido aquí porque conocieron a alguien por Internet y han acabado en la misma situación”, asegura Montejano.

Por otro, chicas jóvenes que vienen a estudiar su maestría o doctorado, se enamoran de un español y cuando terminan sus estudios y se les acaba la beca deciden quedarse a vivir con él, pero de pronto encuentran dificultades para incorporarse al mercado laboral. Empiezan a sufrir dependencia económica de sus parejas, dependencia social (“todas sus amistades son las del novio”) y dependencia emocional. “Todos estos factores acaban siendo la puerta de entrada para que se dé la violencia de género”, cuenta Montejano.

También hay casos de mujeres que llevan décadas con sus parejas y por los mismos factores de dependencia, y por miedo a perder a sus hijos o sus permisos migratorios, encuentran muchas dificultades para denunciar los casos de violencia de género.

Foto de archivo: Juan Carlos Rojas.

Un refugio para mexicanas

Desde Mexicanas en Madrid se ocupan de dar atención psicológica, jurídica y social a las connacionales que viven episodios de violencia de género en España. “Para ellas somos como un refugio”, señala la psicóloga Vanessa Maillefert, quien se encarga de dar atención terapéutica a las connacionales que lo requieren por violencia de género.

“Lo que hacemos es atender sus casos. En primer término, hacer una escucha activa para que vayan tomando fuerza y conciencia de su situación y después canalizarlas con los servicios sociales o con las autoridades”, detalla Maillefer.  “Acuden a nosotras porque somos mujeres y mexicanas, como ellas. Se sienten más identificadas y contenidas, a pesar de que aquí en España la Policía hace un gran trabajo en violencia de género”, añade.

Lo más difícil para muchas mujeres que se ven en el círculo de violencia machista es denunciar ante las autoridades, por la falta de apoyos sociales y familiares, miedo, baja autoestima y también por falta de información. Otras, porque por su condición de inmigrantes, sufren lo que la abogada Griselda Herrera denomina “extorsiones migratorias”.

Sufren “extorsiones migratorias”

“Es importante que todas sepan que, aunque se encuentren en situación migratoria irregular, pueden denunciar. Tienen el derecho a pedir autorización de residencia y trabajo por circunstancias excepcionales, y también pueden solicitar asilo”, informa esta abogada que coordina el área legal de Mexicanas en Madrid. En ambos casos, si se prueba la violencia de género, se obtiene permiso de residencia en España.

Los dos tipos más frecuentes de chantaje que sufren por parte de sus maltratadores las mexicanas en España son, por un lado, la amenaza de que se van a quedar en la calle sin papeles migratorios y dinero como abandonen a la pareja. Por el otro, la idea de que si se van tendrán que separarse de sus hijos, pues el hombre no va a firmar la autorización necesaria para que los niños puedan abandonar España con sus madres.

Foto de archivo: Juan Carlos Rojas.

“De la violencia de género se puede salir”

Para Naxalli Lozano, experta en diversidad de género, la violencia machista es una de las mayores lacras que enfrenta la sociedad y el símbolo “más brutal” de la desigualdad entre hombres y mujeres.

“Lo más importante es que las connacionales sepan que de la violencia de género se puede salir, que no estamos solas”, indica, antes de señalar el amplio abanico de recursos sociales y derechos legales con el que el Estado español protege a las mujeres víctimas de violencia de género.

Entre otros, Lozano cita el número telefónico 016, que es gratuito y no deja rastro en la factura telefónica, y donde profesionales atienden a mujeres que sufren episodios de violencia de género.

Todas las expertas consultadas hacen hincapié en la importancia de no quedarse calladas y denunciar. “Lo más importante es no callarse. Si de algo me arrepiento es de no haber sido capaz de denunciar desde el principio. En mi caso la situación migratoria influyó, pensé que si denunciaba me iban a expulsar, y desde ahí ya perdí y me sentí vulnerable”, relata Daniela. Testimonio de la violencia de género que comparten otras mexicanas residentes en España.