Hace unos días, el Ayuntamiento de Madrid reabrió el Paseo de México, que baja desde la Fuente de los Galápagos en el interior de los Jardines del Buen Retiro con la Puerta de la Independencia, la más cercana a la Puerta de Alcalá y considerada la más emblemática del parque.
Fotogalería: Primavera en el Retiro
MADRID, España.- Las obras, que duraron año y medio y costaron 1,4 millones de euros, devuelven al Paseo de México la fisonomía del Jardín creado por Cecilio Rodríguez y que recupera el arbolado original con la plantación de 48 chopos rodeados de setos y 4.000 unidades de arbustos.
La explanada cuenta con nuevo césped, bancos nuevos, papeleras como las originales, de 1911, pavimento y escaleras nuevas con rampas para mejorar la accesibilidad. La obra sufrió retraso por el hallazgo de restos arqueológicos y por la pandemia.
Ahuehuete ‘mexicano’ en pie, otra buena noticia
El paso de la tormenta Filomena por Madrid en enero hizo estragos en el Retiro al segar la vida de cerca de 1.000 de los 17.000 árboles del parque y al provocar daños en dos tercios del total. Uno de ellos fue el ahuehuete del Retiro, el árbol más antiguo de Madrid, posible descendiente del Tule, en Oaxaca. Aunque se ven las grandes ramas cortadas, sigue en pie este emblema de México y España que ya empieza a reverdecer con las lluvias y el sol de la primavera.
Primavera, estación única para disfrutar del árbol del amor en el Retiro
La vida se abre paso en el Retiro: las enormes hojas de los plátanos proyectan sombras verde-oscuro sobre los caminos de tierra del parque. El verde de las hojas que crecen en cuestión de días desde los últimos días de invierno contrasta con los morados de las hojas del árbol del amor (Cercis) y de otras especies que abundan en el Retiro.
Además del espectáculo cromático para la vista, la primavera despierta el olfato con los sutiles olores de distintas plantas que acaban de florecer. Por otro lado, en los Jardines de Cecilio Rodríguez se puede ver el espectáculo de los pavorreales macho que seducen a las hembras y de patos que acaban de salir del cascarón. Con la primavera llega la vida al Parque del retiro, un enclave madrileño con un toque de México.
