Susana Pliego Quijano destaca los lazos que unen a ambos países en esta entrevista realizada en la Casa de México en España tras una visita guiada de La mesa novohispana. Para los próximos meses anuncia una exposición de Francisco Toledo y otras grandes novedades.
MADRID, España.- “A nosotros nos toca resaltar los lazos que unen a México y España. Estamos en el siglo XXI”, dice Susana Pliego Quijano, que hace constante hincapié en el papel de la Casa de México en España como espacio de encuentro entre dos países. Desde su llegada, el presidente Andrés Manuel López Obrador no ha dejado de exigir a España que pida disculpas por la Conquista, de la que se cumplen 500 años.
Pliego Quijano llevaba pocos meses en Madrid cuando pasó de Agregada Cultural de la Embajada de México a directora de Cultura de la Casa de México en España desde su apertura en 2018. Venía para un año, algo que no sucedió. Ni tampoco el reencuentro en Madrid con sus hijas, lo más duro de vivir en España, país que la recibió “con los brazos abiertos”.
“He conocido mucho más de la cultura mexicana a través de mi trabajo aquí. Mi carrera de antes era más académica”, dice Pliego Quijano. Esta mexicana elogia lo apasionante que resulta trabajar en gestión cultural y abrir pequeñas ventanas a un conocimiento más amplio y global por medio de los guiones curatoriales que prepara para las exposiciones.
“Tenemos la misión de mostrar lo mejor de México”, dice esta doctora en Historia del Arte. Para ello, la Casa de México en España ofrece exposiciones sobre distintos Méxicos: el prehispánico, el colonial, el independiente, el de la Revolución, el de la época de oro del cine y otros más contemporáneos.
El público español que consiguió atraer forma parte de los 140.000 visitantes que hubo en 2020 a pesar de la pandemia del coronavirus. Para ello desarrolló temas comunes a ambos países. Pone como ejemplo a Vicente Rojo, que nació en España, o a Diego Rivera que pasó varios años aquí.
Tetzahuitl, una de las exposiciones para este año en conmemoración de los 500 años desde el encuentro entre dos culturas, aborda los presagios en el mundo azteca que anunciaban un cambio profundo y que precipitaron la conquista en forma de una profecía autocumplida. Así interpretaron los aztecas un cometa, un meteorito y los seres montados en venados que Moctezuma vio en su espejo de obsidiana. La exposición consistirá en un diálogo entre las profecías aztecas y las creencias en Europa en otra realidad que supera lo material y que guardan relación con el ánimo de la gente, que asume un mandato divino. John Dee, matemático prominente y consejero de Isabel, utilizaba un espejo de obsidiana para predecir el futuro.
En las próximas semanas, la Casa de México en España anunciará Toledo ve. Esta exposición del artista oaxaqueño Francisco Toledo, que murió hace dos años, mostrará el mundo desde la óptica del artista, mezclará diseño y arte. Se hará en colaboración con Fundación de Amigos del Iago, del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, que formaron parte de su prolífica actividad filantrópica, sobre todo en favor de las comunidades indígenas.
La llegada de Toledo a España responde a su falta de presencia en este país a excepción de una exposición en los años ’80 en el Museo Reina Sofía.
“Vamos a presentar muchas de sus piezas icónicas de diseño y de arte de abril al 19 septiembre. Luego viene Tetzahuitl y otra exposición del códice vadiano”, afirma Pliego Quijano, que anuncia para el año próximo una exposición de Rafael Lozano Hemmer, al que define como uno de los grandes artistas de arte electrónico con fuertes vínculos con España.
Pliego Quijano afirma que tiene como objetivo seguir mostrando excelencia en los proyectos de la Casa de México en España. Anima a españoles y a mexicanos a visitar esta casa, “su casa”, para fortalecer aún más esos vínculos culturales entre dos países.
